Thursday, May 29, 2008

Complaure

El xiquet digué:
- La novia d’en Marc és una puta. L’altra dia li va xupar la polla.

- Com ho saps? —preguntaren els companys.
- M’ho ha dic el Marc.
- Segur que és mentida.
- A mi també m’ho va dir —intervingué un altre minyó—, però no n’hi ha per tant, es veu que només van ser dos segons.
- Se li va tirar al damunt!
- Què puta!

Aquest és el tractament que rebem les dones des de ben joves, i això que només intentem complaure!

Tuesday, May 27, 2008

L’immensa primavera brava

Va caure un dia d’un niu sense vent i el brogit del terror s’ofegà en un pantà fosc de sang. Quina sàvia tempesta diria vet aquí el polsim màgic que invocarà l’amor, el verd, les cançons? Les grises fissures que envolten la nit de l’absència... No puc obrir el cofre. Vull mirar-te. I els teus ulls són trens perduts en tramuntanes.


Friday, May 23, 2008

Abuelos en las aulas


No es la primera vez que escucho este tipo de comentario y tengo la impresión de que no será la última. No poseo estadísticas ni informes, pero sí esta sensación:

A los jóvenes no les gusta que los jubilados (como los llaman) asistan a clases en la universidad.


Motivos:

-Explican anécdotas largas y tediosas.

-Siempre quieren exponer sus trabajos, que no acaban de tener relación directa con lo que se pedía.

-Nunca tienen prisa y te hacen perder el tiempo.

-Son unos pesados. Se enrollan como una persiana con batallitas que a nadie interesan.

-Les huele mal el aliento.

Cuando yo estudiaba, había gente así, aunque no eran jubilados.

¿Debería reservarse la universidad tradicional para los jóvenes y, si acaso, crear una nueva para personas mayores, o debería la universidad ser universal?

Sunday, May 18, 2008

Luna. Remonta. Lluvia.

Quizás lo sepa. Pero es suficiente con mirarse a los ojos.

Somos frágiles.
Y el amor es una alucinación.

¿No es la manera?
Quiero estar contigo...


El deseo es la burla del destino. Y el estómago nos guía.

Mañana sabrás. El tiempo llueve.

Friday, May 16, 2008

Cena de un viernes de mayo

Estoy cansada: lobotomizada. Es viernes por la noche y no quiero cenar ni follar ni salir ni bailar ni escribir ni tocar ni charlar ni leer ni ver ni oler ni caminar ni beber ni escuchar ni jugar. Sólo quiero meterme en la cama y dormir. Pero qué rabia me da, joder, ¡que es viernes!

Bueno… Ahora que lo que está en el horno comienza a aromatizar el ambiente, tal vez sí que podría cenar.

Come on boy… Bring the wine, bring the wine, hold me tight and make me smile.

The world is a vampire…

Mi padre suele rememorar aquellas palabras del abuelo Abril: “tú no has trabajado nunca en la vida”, refiriéndose a que mi padre tenía un trabajo intelectual y no se deslomaba cargando mercancía en el puerto.

Admiro a todas aquellas personas que trabajan (de lo que sea) y después encuentran la energía para mimar sus vidas, para cambiar el mundo, para seguir brillando. Aquellos rufianes que pagan con los demás el pan nuestro de cada día deberían estar en la cárcel, para que supieran en qué consiste una auténtica prisión y echen de menos sus trabajos.

Al terminar la jornada, hay mucha gente que se sube en el tren en la misma estación, una de esas ciudades tecnológicas en las que trabajan una buena parte del contingente laboral. El tren se convierte en un culebrón hispano, entre risas y remilgos que acompañan mi siesta hacia atrás, para sentir que me llevan y no que me empujan.

Ea, ¡a cenar! Yo que puedo. Yo que tengo un trabajo y dinero y un techo.

Y me voy antes de comenzar con el recuento de las desgracias que han acontecido esta semana...

The world is a vampire, sent to drain
Secret destroyers, hold you up to the flames
And what do I get for my pain?
Betrayed desires, and a piece of the game

Even though I know - I suppose Ill show
All my cool and cold-like old job

Despite all my rage Im still just a rat in a cage


Wednesday, May 14, 2008

La Quinta Avenida

Existen las rubias ricas de menos de treinta con perrito-rata saturado de perfume y escondido en un brazalete de plata-móvil-mp3-reloj. La vi. Caminaba lánguidamente entre accesorios de más de 3.000€ en una de las boutiques de lujo del Passeig de Gràcia. Primero pensé que era la Hilton. Vestido corto blanco (generoso escote) bandana amarilla en los cabellos, y tacones de vértigo… Total, da lo mismo quien fuera. Los dos cachorros de gaviota que encontré en mi camino espachurrados en el suelo no me causaron tanta impresión como aquel rostro de aburrimiento. Eso, pensé, es ser rico.

A su favor diré que lo de pasearse por la ciudad con un perro-murciélago colgado del brazo y con esa pinta de muñeca requiere gran valentía. Yo no me atrevería.

Sunday, May 11, 2008

Coordenades


Brother ha marxat a les planes altes i aquest era el matí des de la finestra de la cuina, a la seva nova morada.

S’és més lliure a la ciutat que al camp? Hi ha més temps al camp que a la ciutat? Es pot fugir dels monstres al camp? Tenim més forces per nodrir la nostra imaginació?

La gran màgia de la ciutat és la possibilitat (si més no il·lusòria) que qualsevol encanteri inesperat es creuarà en el nostre camí. Al camp poques coses se’t creuen. Excepte el vent, els núvols, els cavalls... Quan es veu l’horitzó no hi ha gaire pensaments de frustració.

41° 47′ 33″ N, 0° 48′ 27″ E

Thursday, May 08, 2008

Smells like real

Does she have a name? Why all this secret, why all this “it is just a girl” kind of talk?

I went to the bakery. You know, people don’t really like the bread here, they like baguettes… That’s what they call “real bread”. But I like bread here. There is this bakery with two gorgeous young girls: ruby cheeks, glow in their eyes, and that country smile… I think everybody goes there because they are so pretty, but also the bread is baked at the rear of the house, and from the counter standing you can see the big jars of clay full of wheat and the backer at a big table by the old oven; and everything smells so real.

So…

How long should I go before I get one word? I can tell you of course that it is about to rain and that the whole world feels gloomy because the future will be a disaster and there is no way to stop it, being as we are so talented and immature at the same time… It’s like nobody is going to risk the little we have… Or maybe we have too much.

Will you stop this rubbish for me?

How am I supposed to keep on believing in you if you don’t say her name?

Then again, why should I believe in you or in anybody for that matter…

Everything sounds like a song.

Yet your eyes are so steady,
waiting for me to take off my clothes.

Saturday, May 03, 2008

Mayo


Ante la insistente capacidad de autoflagelación que atravesamos como pueblo al considerar que nunca conseguiremos nada porque somos unos cagaos y unos conformistas y que con la cerveza y los chocos del domingo se nos olvidan todas las deficiencias sociales, y puesto que este mes se celebran 40 años del 68 francés (aunque el 68 debería recordarse por todo lo demás también, comenzando con el asesinato de Luther King) os contaré la siguiente anécdota.

Cuando vivía en Estados Unidos, atrapada en el miedo, estupefacción y barbaridad del September 11 y todo lo que vino después, y en aquellos años terribles en los que los americanos me decían con paternalismo “Spain is a friend” porque el capullo de Aznar hizo sus pinitos chupando las pollas de los más gilipollas (de manera inteligente, of course, el desenlace de los hechos así lo demuestran), mis amigos y familiares me mandaban fotografías de las manifestaciones en contra de la guerra y me llamaban por teléfono en plena “Cacerolada” para que pudiera compartir in situ el sentir de mi pueblo. Aún hoy escucho el recuerdo de aquel estruendo que a través del auricular tanto me reconfortaba mientras los flamingos desaparecían del patio a la búsqueda de un escondite antes del huracán. Cada noche, cada fin de semana, mi pueblo llenaba las calles pidiendo la paz. Aún hoy, al recordarlo, se me eriza la piel.

Tampoco hay que ser francés y tenerlos bien puestos para dejar claro lo que queremos. El problema es ponernos de acuerdo y, cuando lo hacemos, suele ser espectacular.

Sí somos capaces de organizar huelgas: los conductores de autobús de TMB han conseguido finalmente sus dos días.

Sí salimos a la calle: el movimiento V de Vivienda ha conseguido que, por lo menos, el tema quede reflejado en la agenda política.

Y podemos cambiar el rumbo de la política internacional de nuestro país.

No es una decisión fácil de tomar para un presidente que acaba de llegar al gobierno retirar las tropas en plena guerra internacional. Pero éramos muchos, éramos España. Y España no quiere más guerras.

Cuando se asiste a conversaciones encendidas sobre si se tiene derecho a esto o a lo otro por parte de tal o cual comunidad, eso es lo importante que deberíamos recordar.


Friday, May 02, 2008

Del amor al odio

En mi paseo matutino de Primero de Mayo busqué el verde de las hojas en el azul intenso del cielo y ese aire primaveral exento de tráfico. Sin embargo, regresé a casa corriendo y apartando con los latidos de mi corazón las auras malignas que habitan en nuestras calles.

Hay que asumirlo: algunas personas no deberían estar juntas, sino por ellas mismas, por respeto a la sociedad. No sé porqué debo presenciar las discusiones de semáforo de una pareja que ha salido de casa porque es fiesta y toca paseo y que, mientras su prole berrea de aburrimiento y mal rollo, ellos siguen erre que erre con la tediosa discusión que va como sigue:

—Te lo estoy diciendo desde primera hora: no sé adónde quiero ir.

—Pues sino quieres ir a Sitges…

—Estará imposible de coches.

—Pues Vilassar también.

Lo molestoso no era el tema (que también, porque será que no hay cosas que hacer en esta ciudad), sino sus caras de odio, de odio retenido educadamente pero que no obstante atravesaba la atmósfera tan venenoso como escupitajos de cicuta.

Seguro que los niños llorones tenían una idea de adónde querían ir.

Un poco más arriba, otra pareja discutía porque la una quería bajar paseando y el otro en metro, mientras, parados en la esquina que separaba sus ambiciosas opciones, su hija hablaba con el amigo invisible de turno, ajena a la estupidez de sus padres.

Los amores que no pueden ser no deben ser, sobre todo cuando se ve a la legua que la pasión dio paso al fastidio muchos años atrás.

Divórciense señoras y señores, y déjenme escuchar las golondrinas.