Llueve; y las emociones vuelven a subir los escalones de la trascendencia. Si hubiera un termómetro de lo sublime, hoy hubiera manchado las líneas de lo cierto, lo verdadero, la vida con sus días buenos y sus días malos y todos los colores intermedios.
La radio regaló, en plena retención, el Telegraph Road de los Dire Straits, con sus más de 14 minutos perfectos, incorruptos y esa historia tan actual.
M'agrada: "...subir los escalones de la transcendencia." Gran figura literaria.
ReplyDeleteVigila la malenconia. La seva dolça amargor pot arribar a ser molt adictiva...
Gràcies Vitriol... Fa temps que faig els exercicis per controlar la melangia, per conventir-la en una mesura més del temps. Una abraçada.
ReplyDeleteEsa canción está formando gran parte de mi presente. :)
ReplyDeleteBruja
es que no sé si a ti te pase, pero de aquí a final de año empieza la temporada de depresión para mi. Odio los finales de año.
ReplyDeleteUn beso!
Pues no, Demian. Esta es la época que más disfruto :-) Aunque recientemente tengo tendencia a entristecerme para Nochevieja.
ReplyDeleteAh, Bruja, hay presentes que no terminan nunca ;-)
¡Gracias por la visita!
Bonita reflexión, y buena música.
ReplyDeleteSaludos