Friday, October 14, 2016

Obama, España y el Sol


Resulta que el peligro inminente en el mundo, oh qué sorpresa, no son las incomodidades que podamos sufrir en los países del bienestar, como estar unos días sin tus productos de consumo favoritos, electricidad, agua, y estas cosas de las que tanto te acostumbras a prescindir cuando vives un terremoto o un huracán en un país donde sabes que volverán (¡Pobre Haití! ¡Pobres haitianos y haitianas!).
El peligro inminente es el obvio, sí, aquello que sigue siendo un peligro siempre pero que parece que hemos decidido dejar de ponernos la chapa aquella famosa que se ponían nuestros antepasados de los años setenta, aquella pegatina que aún se puede encontrar en el lavabo de algún camping abandonado de montaña, aquel Nuclear no gracias, no thanks, no merci! Ese smiling sun que fue quizás el primer smiley de la historia y que simboliza la energía que podemos obtener del sol, en contra de los Chernobyl y Fukushimas que aún vendrán.
Paradójico que en España se penalice la obtención de la energía solar y que sea España, precisamente, un país que no tiene todavía protocolo de actuación para las centrales nucleares ante una emergencia como fenómenos de pulso electromagnético. ¿Está España en contra del sol? ¡Qué prepotencia!

Obama, ese presidente tácitamente mundial y cool, ha dictado una Orden Ejecutiva Presidencial que ya recoge la web oficial de la Casa Blanca para que las distintas autoridades de Estados Unidos se coordinen a todos los niveles para preparar a la nación para caso de desencadenamiento de un gran fenómeno del clima espacial, con un plazo máximo de "120 días" a partir de hoy para que todos los reactores nucleares del país cuenten con protocolos de apagado de emergencia (Sección 5.b de la Orden), aspecto este que venía representando la mayor preocupación en caso de un nuevo gran evento solar como el Evento Carrington de 1859. (fuente: nuevatribuna.es)

Alemania ya está tomando sus medidas.

Y aquí, ¿qué? ¡Pues agotando las entradas de los triunfitos!

Wednesday, October 12, 2016

Emilio Herrera Linares

Es curiosa la fecha. A mí me encanta celebrar cosas, y si unen, pues mejor.

Por ejemplo, una buena fecha de "Hispanidad", si fuera a la española, sería el 9 de diciembre, en honor a la Constitución de 1931, de la Segunda República, o el
13 de febrero, en honor al granadino Emilio Herrera Linares, que diseñó en 1935 la "escafandra estratonáutica", el primer traje espacial (para sacarnos de este planeta y sus pequeñeces). Gracias a este diseño se desarrollaron el resto de trajes de astronauta que conocemos hoy en día.
Herrera fue presidente del Gobierno de la República española en el exilio.

Si se tratara de una "Hispanidad" más amplia, que abarcara a todos los países de habla hispana, podría considerarse el 12 de julio (en honor a Neruda), o el 24 de agosto (en honor a Borges), el 29 de septiembre (en honor a Cervantes), 5 de junio (Lorca), 26 de agosto (Cortázar), 2 de agosto (Isabel Allende), 28 de julio (Gloria Fuertes), 25 de abril (Corín Tellado), 16 de mayo (Rulfo), ¡Si habrá fechas! Podríamos incluso realizar un referéndum por internet de todos las ciudadanas y ciudadanos de los países de habla hispana para elegir nuestra fiesta de la lengua (porque lo de la hispanidad va de eso ¿no?) Creo que eso sería divertido, entrañable, y haría que nos sintiéramos unidos. Porque, a ver, a mí, por ejemplo, me une más al resto de España "Mi agüita amarilla" de los Toreros Muertos que una fiesta militar. Y a América Latina me une más el tomate, la verdad.

En EEUU, el 12O, es el 11O (cambio horario), Columbus day, nombre mucho más respetuoso con la historia que Fiesta Nacional. Colón fue un explorador. Darle calidad de colonizador a través de una fiesta imperialista, lo convierte en genocida. ¡Pobre hombre!

Monday, October 03, 2016

Cuando crees que ya no puede liarse más...


... ¡Van y te sirven un culebrón!
Que yo para intrigas ya tengo mis series, ¡Oigan! Que ustedes están para garantizar los derechos humanos, los servicios públicos y la paz. ¡Que les pagamos nosotros! Es que se comportan como si fuera al revés.