Wednesday, September 28, 2016

Gabriel Rufián en el hospital

Estoy en la habitación con Toni. Reviso las redes. Hablo con él. Le cuento los chismes. Las redes han convertido todo en un chisme. Incluso la guerra. Pero mira, le digo a Toni, Rufián sigue con su poesía. Le pongo la última intervención. Tú no le puedes ver, le digo, pero va vestido como una estrella de rock en una entrevista seria. Con bambas. Bien peinado. Y bien afeitado. ¡Es que Toni y yo somos tan fans! A Toni le gustan los chicos. Le gustan más las chicas, pero algún chico le pone mucho. A mí me gustan los chicos, pero alguna chica me pone, como Chantal. A los dos nos pone Gabriel Rufián. Más de una vez hemos fantaseado. Nos apasiona su voz, esa voz de poeta que desgrana inesperadas sorpresas. Nada que ver con las canciones, que siempre aciertas qué palabra vendrá después. Gabriel Rufián, cuyo solo nombre ya seduce, es infinito, admirable, excepcional. Todo entra en su oratoria, sin gritar, sin insultar. Porque resulta que las verdades pueden decirse, tal cual.


Monday, September 26, 2016

El Jardí ha cerrado

Many great memories, o mejor dicho, UN gran recuerdo, el mejor. Allí comenzó la historia más bonita e importante de mi vida.

Buscaba un sitio donde quedar con los amigos, ahora que estoy lista para regresar a la ciudad, y me encuentro con el aviso de "cerrado" en su página web. Terminó el contrato que tenían con el Ajuntament.

So long!

Saturday, September 24, 2016

Cortesanos y cortesanas


Y de repente el divorcio de los Pitt-Jolie acapara todas las esferas. Periódicos, tv, radio, redes, cafeterías, calle, whatsapps. Me hace pensar en Perséfone. Y en Enrique VIII. Y en Cleopatra. No sé cuál es el extraño transtorno de la personalidad que permite a un ser humano alegrarse por las desgracias de alguien más encumbrado, a quien no conoce más que por los tabloides. Y aunque seguro que, como todo, ya tiene un nombre, yo lo llamaré el “síndrome de la corte”. Que tú, pobre ser que trabaja de sol a sol en la aldea, te creas por un momento más feliz que la persona a la que has estado idolatrando.
foto Vanity Fair Italia

O que te veas en la necesidad de hablar de ello, como hago yo, humilde trobadora de esta época ridícula en tantos aspectos (y épica en tantos otros).

Los valores en los que nos movemos son antiguos y zafios, además de carecer de ingenio. Y si realmente alguien cree que ahora el mundo es un lugar mejor porque vuelven a tener una oportunidad con Angelina o Brad, como cuando en el colegio las niñas pensaban que un día podrían ligarse al príncipe, el Felipe, es que estamos muy enfermos. O que yo no acabo de pillarle el sentido del humor.


Monday, September 19, 2016

La casi inquebrantable cadena de la ofensa


Elena se ofende porque Sonia ha decidido algo que le parece que no está bien. Sonia se ofende porque a ver quién es Elena para ofenderse de algo que no le afecta. Sin embargo, Elena se siente muy afectada, de modo que llama a Carol para explicárselo. Carol está hasta las narices de estar en medio de las dos, y aunque normalmente defiende a Sonia porque Elena es muy dominante, en este caso decide que ella también se siente ofendida por la decisión de Sonia. Sonia llama a Carol, para quejarse de que Elena esté ofendida y Carol no le coge el teléfono. Tiene que pensar bien sus palabras. Que quede todo claro, pero tampoco hay que perjudicar la relación. Como Carol no ha cogido el teléfono, Sonia sospecha que ya se ha conchabado con Elena, como ha pasado otras veces y está muy cansada de tener que andar siempre justificando su vida. Lo que ocurre es que no soportan que tome decisiones sin consultarles. ¿Y a ellas qué les importa, de todos modos, si caga dentro o fuera, acaso están ahí para recoger su mierda? Siempre igual. Ahora está muy, muy ofendida con ellas. Peor aún, ¡muy cabreada!

De modo que Sonia llama a Ramón. Hace tiempo que no charlan. Tentada de contarle lo ofendida que está con Elena de que se haya ofendido con ella por algo que no es asunto suyo, y lo cabreada que está de que se haya puesto a Carol de su parte, decide:

Contarle simplemente la decisión que ha tomado y de la que dependen los próximos meses de su vida.

Y a Ramón le parece bien.


Wednesday, September 14, 2016

Cambio de actitud de los mosquitos


Decía la vecina al vecino: “No sé si te has dado cuenta, pero los mosquitos han cambiado de actitud. Antes eran varios los mosquitos que venían y te picaban, ahora es uno, el mismo, que va dando vueltas y te acribilla y si lo matas, no vienen más. Es como si se hubieran organizado para repartirse la sangre”.

Friday, September 09, 2016

Lollapalooza


Mi amigo Diego necesita viajar como quien necesita entrar a todas horas en su perfil social. Literalmente. Es su medidor del yo. Si no viaja, se olvida de quién es. Se mira al espejo y no se reconoce. Pierde los pensamientos. Sufre ansiedad. Y los suyo no son visitas turísticas a ciudades con servicios, no, lo suyo son remotos lugares donde llegar a pie y dormir entre las rocas.

Este año no puede aparcar el trabajo y no puede hacer su viaje anual. De la perspectiva, se mordió las uñas, las de los pies también y se fue arrancando las cejas. Le sugerí que saliera mucho de fiesta, para compensar, él que puede. No es lo mismo, me dijo. Además, salir da mucho palo. ¿Cómo te va a dar palo ir a un concierto y para nada cooperar durante un mes con hospitales en Camboya?

Y lo hizo, salir, y hace meses que no lo veo. Ahora mismo vuela rumbo al Lollapalloza en Berlín y me da una envidia tremenda, una envidia feliz. Me mandó una foto justo antes de embarcar. Tenía todas sus cejas.