Wednesday, November 30, 2016

Los días más oscuros (en el hemisferio norte)



La pesadilla/culebrón antes de Navidad terminó con unas decisiones tomadas que tranquilizaron a todo el mundo pero que llegado el momento, es decir, tres días antes y sin haber previsto despensa, seguro que a la familia le dará por replantear. El único sabio entre nosotros, Jeremías, ya dijo hace muchos años que él el día de Navidad es muy mala compañía y que nunca vendrá. Ah, el bueno de Jeremías, qué envidia le tenemos algunos y cómo lo critican otros. “Jeremías nunca viene”. Como si eso fuera una falta capital. Cuando la abuela ya no pudo, Navidad la organizaba mi madre, y luego mi tía y después de volver del extranjero, yo. Pero luego me casé, y a nuestra familia disgregada, como disgregadas son la mayoría de las familias aunque jueguen a otra cosa, se añadieron unos suegros que, además de separados, son de distintos países, hablan lenguas distintas, tienen familias distintas y religiones distintas. Eso, que sería suficiente para decir “au revoir Navidad” y explicar a mi hija que lo que en verdad se celebra es una leyenda alrededor de poder encender luces en los días más oscuros del año (en el hemisferio desde el que escribo), me está volviendo loca, chat por aquí, teléfono por allá, vacaciones que no cuadran y dinero que no alcanza.

Buena suerte con lo vuestro.


Festival de las luces de invierno de Japón

2 comments:

  1. tot això és cert. però aquest Nadal no té res a veure amb al que Ell ens va ensenyar: estimar-nos cada dia, a cada moment. La parafernàlia actual ofen la seva pobresa.

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    1. Um. Estimar-nos cada dia, quina meravellosa utopia!

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