Vuelta al caos, aumento de decibelios (y no precisamente armónicos), mal humor, prisa, olor a leche recalentada (¡puaj!) y el fin de mes que queda lejos, aunque parece que tuviera que ser el próximo viernes.
Siempre podemos refugiarnos en una biblioteca y pretender que los libros tienen respuestas a la vida, cuando los libros no son más que referencias a otros libros.
Siempre podemos ver una película y cloroformizarnos.
Paso. Me iré a correr por el monte, mientras aún queden tardes.
A ver si te vas a perder por el campo...
ReplyDeleteAprovecha que quedan tardes........ Y montes!!!!
ReplyDeleteLo que nunca me encuentro es un conejito loco al que seguir ;-P
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