Wednesday, December 17, 2014

Pienso sonreír cada día, aunque no estés aquí para verlo


Los contenedores de en frente siguen proporcionando gran entretenimiento. Anoche un guarro apuntaló un colchón manchado y deforme y un somier de láminas. Eran las tantas y lo pillamos in fraganti, porque tenemos en el pueblo un servicio de recogida de muebles fantástico, que sólo tienes que anunciar que soltarás prenda y ellos pasan a buscarlo. Eso sí, antes de las diez de la noche.

Esta mañana, como cada mañana, me he acercado a mirar qué se podía aprovechar de los deshechos de la noche (a veces hay una buena lámpara o una silla) y he visto escrito, en una lámina del somier abandonado: “Pienso sonreír cada día aunque no estés aquí para verlo”.

Me ha dado pena la cama, no tenía pinta de haber vivido un amor feliz.

5 comments:

  1. El tipo era un guarro y quizá desdichado, pero la frase del somier no deja de ser bonita

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  2. Hola. Sí, pero tiene un puntillo de rencor y victimismo que a mí me revuelve un poco, la verdad.

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  3. Quizá colchones y somieres prefieran los amores infelices, las parejas aburridas de escasos y suaves encuentros eróticos; que los amores apasionados deben pasarles dolorosas facturas a sus consistencias.

    A mí también me gusta la frasecita y, si no lo hubieras dicho, no habría precibido ese puntillo de rencor y victimismo que contiene (aunque a lo mejor no había tal).

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  4. ¿Victimismo? ¿Rencor? es una interpretación desde luego, pero quizás esa interpretación diga más de tí que del que la ha escrito... en cualquier caso es melancólica, poética, voluntariosa...

    Un saludo

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  5. ¡Hola! Gracias por vuestra visita.

    Miroslav, ja ja, cada vez me hace más gracia la personificación del colchón;-) Buena observación. Aunque las camas modernas aguanten más trote y los vecinos ya no deban sufrir las vibraciones y embestidas (ruidos humanos a parte), esta no era una cama moderna.

    Lansky, puede que tengas razón, en lo de mi interpretación. Soy de cerrar puerta y concentrarme en no pensar en lo que ya no está. Me carga un poco la gente que no hace lo mismo. Quizás quién escribió la frase lo que hacía era precisamente cerrar la puerta :-) Al fin y al cabo, cada uno lo hace a su manera.

    Y sí, estoy de acuerdo con los tres, la frase es preciosa, estuve un buen rato pensando en si debía hacerle una fotografía, pero en lugar escribí el post, me parecía menos robo y más presencia.

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