Siendo
niña aprendí que era mejor un gag que una
opinión. Como estudiante, hice
preguntas difíciles y no
di ninguna explicación. Como hija de
obreros, supe que
por muchos méritos que esgrimiera, jamás saldría de las
trincheras. Como mujer, mastericé la
frivolidad, pues de qué otro modo me iban a escuchar.
Como catalana, sufrí la violencia por
hablar catalán, a pesar de que en el artículo 3 del título
preliminar de La
Constitución se
detalla que “La riqueza de las distintas modalidades
lingüísticas de España es un patrimonio cultural que será objeto
de especial respeto y protección”. Como
republicana tengo a familia que nunca he llegado a conocer
y de la que solo conocemos el final de
uno, gracias a Montserrat Roig: el
hermano pequeño de mi abuela, que fue
deportado a Mauthaussen, con
otros diez mil hombres y mujeres de “nuestro holocausto” que no
sale en los libros de historia porque todavía NO HABLAMOS DE ESO.
Foto de la SER |
Me
llamó mi amiga americana y me preguntó "qué tal" y le conté; ella insistió,
“no, no, que de la política, ¿cómo estáis?”, y le dije: “mejor no
hablemos de política”. “¿Por qué no?”, se extraño ella. No sé, es como una
consigna ¿no? En el trabajo, en la escuela de los peques, en el
gimnasio, en las tiendas, en el bar, “mejor no hablemos de
política, NO NOS VAYAMOS A PELEAR”.
Hay
un gran déficit de diálogo, de discurso, de capacidad democrática,
cuando crees que si hablas de política igual te van a pegar o
denunciar o meter en la cárcel.
Los
republicanos catalanes nos piden hoy desde la cárcel y el exilio que
no tengamos rencor, que la vía Mandela es la vía que gana, que no
tengamos miedo, que no tengamos traumas. Que no hay venganza, solo
progreso. Paciencia. Corage. Estudio. Inteligencia. La democracia
ganará...
Para
que luego, encima, vayan diciendo por ahí que los catalanes somos
unos cobardes, no como otros, que ponían bombas y se hacían
respetar. ¡Manda huevos!
Ya lo señala Rajoy: "no nos metamos en eso"
ReplyDeleteEn otro orden (severo) de cosas, comparar con Mandela a los del Proces me parece una tristísima y frívola ignorancia: Mandela unió a los ciudadanos de todos los colores, ¿te suena parecido a lo que está pasando en Cataluña?
Un saludo afectuoso aunque luctuoso
No lo comparo para nada. Solo digo que es lo que los politicos independentistas nos piden. Que es mucho mejor que lo que piden los otros (no repetiré las barbaridades que nunca deberían haber sido dichas). Y también digo que aquí los independentistas en la calle no están rollo Mandela para nada. Están cabreados. Y yo también lo estoy. Que no soy ni independentista, ni equidistante, ni unionista, ni siquiera muy catalanista. Sólo estoy harta de que me estigmaticen, me falten al respeto y me traten mal. Quizás sea fácil decidir que no tienes un estigma, si crees que no lo tienes. Pero no son los catalanes los que comenzaron sembrando odio. En mi opinión. Y yo sé lo que es ir por España y que te traten mal, por el acento. Antes, en los ochenta, no. Pero desde Rajoy y Ciutadans, sí. Y estoy muy cansada de tener que hacer política de bar con gente que me parece fantástica, si no les hubieran comido el coco. Y me parece una tarea tan hercúlea deshacer el mal que han hecho, que a veces tengo tentaciones de escoger bando.
DeleteUn abrazo esperanzado de que todo esto sirva para mucho y no haya más víctimas.
Yo tambie´n me niego a escoger bando, los dos me parecen detestables, si es que sólo hay dos, como dices tú en mi blog (para mí cada uno está dividido en varios de su padre y de su madre)
Delete